De lo que se siente el "des-bautizo"

Llegamos puntuales, viste como somos nosotras, a las 5 menos cuarto estábamos ahí. Obvio que lo primero que ven mis ojos de loca son los colores de la bandera del orgullo gay, y claro, ahi estaba la CHA. Nos juntamos con ellxs y lxs de la apostasía, y nos fuimos juntxs al "arzobispado". Cosa extraña, ahí adentro se respira aire denso, energía extraña, un no se qué, me costaba respirar. Me preguntaba a mí misma qué habría sentido cuando me bautizaron a los dos meses, pero, claro, no me acuerdo. Lo que sabía era que ahora me sentía coherente y tranquila con mi decisión. (Que no me vea la abuela, no me saquen fotos, pobre abuela) Pero claro, el periodismo no puede con su genio, y me sacaron mil fotos cuando entregaba mi carta de "renuncia a la iglesia católica" ... ¡qué bien se siente! había dos monjitas espiando con cara de limón-. yo creo que deberían ser tortas que no se animan a asumirse. y bueh. la cuestión es que no soy más "del rebaño"...y se siente "excelente..."